LirioAustral

Saturday, May 21, 2005

"Arriba en la cordillera, no los vio pasar ni el viento"

Los chilenos estamos consternados por la tragedia ocurrida en la cordillera, el pasado miércoles 18. Un batallón del Regimiento 17 de los Ángeles compuesto por 485 reclutas fue sorpresivamente alcanzado por una tormenta de viento y nieve que los dispersó debido a la baja visibilidad y orientación. El Éjercito inició las operaciones de búsqueda que se han visto obstaculizadas por las condiciones climáticas que continúan adversas. 13 "peladitos" han fallecido y sus cadáveres han sido entregados a sus familiares en medio de escenas de intenso dolor y desolación. Aún están desaparecidos 41 reclutas y las esperanzas de encontrarlos con vida son casi nulas. La situación se ha complicado aún más debido a las confusas informaciones que ha entregado el éjercito; cosa que exarcebó los ánimos de los familiares que habían permanecido en el gimnasio de la institución desde el miércoles.
Es la peor tragedia que ha sufrido el éjercito chileno en tiempos de paz, el dolor que nos ha provocado nos ha mantenido atentos a las noticias. El Presidente de la República, Ricardo Lagos decretó duelo nacional de 3 días y acompañó a las familias en una ceremonia religiosa ecuménica por el descanso de las víctimas; todos de casi 19 años, provenientes de familias humildes de la zona que vieron en el éjercito la posibilidad de una carrera profesional.
El Comandante en jefe del éjercito Emilio Cheyre se apersonó en la zona y dirigió personalmente las operaciones de búsqueda y en sus declaraciones a la prensa dificilmente pudo ocultar la honda tristeza y desolación que lo embarga. Descabezó rápidamente al regimiento y pidió la investigación judicial para buscar a los responsables de la tragedia.
Las críticas apuntan a que jamás se debió permitir un ejercicio en esa zona con reclutas que sólo tenían poco más de un mes de instrucción, que la ropa que llevaban era adecuada para la montaña pero no para la alta montaña en que se convirtió el área por la tormenta de viento blanco, las temperaturas oscilaban entre los 8 a 20 grados bajo cero.

¡Señor y Dios mío! , a tí encomiendo las almas de estos jóvenes, recíbelos en tus amorosos brazos y sus padres y familiares dales la fortaleza y el consuelo para aliviar en algo ese terrible dolor que los embarga.
Ámen.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home